A más de 1.700 m de altitud, en el cerro de La Mesa, un espacio cargado de magia y espiritualidad dentro del término municipal de Navarrevisca, se celebró el pasado fin de semana un festival de música y danza dentro de este paisaje en el que conviven restos arqueológicos de distintas épocas: peñas sacras ligadas a ritos prehistóricos, tumbas antropomorfas visigodas, la ermita de San Pedro del siglo XIV o la plaza de toros del XVIII.

Leticia Sánchez, alcaldesa de Navarrevisca, explicó en la inauguración del festival los trabajos e investigaciones que se están llevando a cabo en este importante yacimiento arqueológico situado en un cerro, desde el que se pueden divisar más de 10 pueblos diseminados en el valle del Alberche.

Leticia Sánchez del Río, alcaldesa de Navarrevisca, junto con Carlos García, presidente de la Diputación de Ávila y el arqueólogo Blas Cabrera en el acto de inauguración de Lo Sagrado.

Durante tres días, con el protagonismo muy destacado de mujeres, se ha celebrado esta interesante actividad cultural en la que la música, en distintas facetas, ha sido la principal invitada. Y ello ha sido posible gracias al impulso y la dirección artística de Concha Hernández, una gestora cultural fundadora y directora del festival Ellas Crean. Con un límite de asistencia máximo de 100 personas en todas las actividades por respeto al entorno, comenzó  el primer día con el grupo Egeria. (https://www.egeriavoices.com/)

Asistentes a la sesión del 26 de agosto

Egeria, la viajera y escritora hispanorromana del siglo IV, da nombre a este conjunto integrado por cuatro mujeres muy jóvenes, que entienden la música medieval como algo que se vincula con la esencia más profunda del ser humano. Desde la atalaya del yacimiento de tumbas prehistóricas interpretaron piezas medievales, a capella o acompañadas por una lira y una sencillísima pandereta.

Un momento de la actuación de Egeria.

El sábado fue el turno de Omos Uno (https://www.omosuno.com/), una compañía de música y danza nacida en 2008, que sobrecogió al público con su actuación en un atardecer que parecía haber sido encargado expresamente para esta ocasión.

La danza de Omos Uno.

El contacto directo y masivo con la gente del pueblo se produjo esa misma noche del sábado en la plaza de la Constitución de Navarrevisca con la actuación de Vanesa Muela, posiblemente la mayor divulgadora de la música tradicional, que ha investigado y conoce en profundidad el folklore tradicional de Castilla y León. Acompañada de instrumentos caseros como el almirez, la sartén, las cucharas y otros, conectó rápidamente con un público que se sabía las letras de las canciones, patrimonio del folklore popular de la zona.

Por último, el domingo 28 finalizó este original Festival en la piedra Sacra con la participación del dúo Arcadia (https://duoarcadia.com/) integrado por Pilar Rius y Avelina Vidal, que interpretaron varias piezas junto a la Piedra Sacra con sus guitarras contemporáneas.

Un festival que para Concha Hernández ha tenido un balance muy positivo, ha sido muy respetuoso con el medio ambiente y ha contribuido a un mayor conocimiento del patrimonio del cerro de la Mesa. Y que la alcaldesa de Navarrevisca ya está pensando en repetir el próximo año.

Ex Corde, un festival pionero a nivel internacional, se celebra todos los años (con la excepción de 2020 a causa de la pandemia) en Molina de Aragón (Guadalajara) y centra su actividad en la música contemporánea con la participación de 15 guitarristas internacionales de muy diversas edades, que encuentran en él una manera diferente de enfocar la pedagogía musical. 

Este festival nació con la idea de crear un espacio musical diferente en el que abordar el estudio de la guitarra y su repertorio desde un punto de vista analítico, técnico e interpretativo distinto, global y multidisciplinar a través del contacto con compositores y compositoras en las jornadas de creación actual. Durante su celebración se realizan conciertos con músicos punteros de la escena contemporánea, talleres de jazz e improvisación, talleres de formación escénica con actores, análisis musical, participación en la orquesta de guitarras, además de clases individuales y másteres con profesores de talla internacional.

Los habitantes de esta población, ubicada en el Geoparque del Alto Tajo, participan también de las actividades de este festival, mientras que el alumnado goza del contacto con la naturaleza, de la flora y la fauna de este lugar privilegiado.

Dirigido artísticamente por Pilar Ríus y Avelina Vidal, Ex Corde es también un ejemplo de programación paritaria y de respeto a la igualdad de género, ya que sus directoras artísticas tienen un firme compromiso con la todavía muy desconocida labor que desempeñan las mujeres dentro del ámbito de la música.

En la programación de este año, dedicada a las mujeres, se celebrarán varios conciertos: “El viento no se llevará las palabras” con Anna Margules (Flauta de pico, voz, electrónica y una sola intérprete); “La voz del interior peninsular” con Vanesa Muela – Música de raíz; “Lo que la historia calla” con Antonio de Innocentis (Guitarra); y “¡Asómate a esa ventana!”, “Sones de calle y de palacio”, “La Sonorosa” (Música y danza de los S. XVII y XVIII)y “¡Doña Blanca nos guíe!”, Concierto molinés con alumnos, profesores e invitados.

Ex Corde incluye también en esta edición de 2021 jornadas de creación actual y composición (con Iluminada Pérez Frutos y Diana Pérez Custodio, compositora residente de esta edición y en cuya obra se centrará su trabajo colectivo), clases máster de guitarra (Antonio de Innocentis), formación escénica (Jesús Barranco y Raúl Marcos), música brasileña para guitarra (Cláudio Tupinambá), un taller de percusión con instrumentos de cocina (Vanesa Muela) y música y danza en los aires ibéricos del Barroco (Edwin García). Hay además una visita al Geoparque de Molina de Aragón.

Del 16 de junio al 18 de julio en el Teatro Galileo tendrá lugar la primera edición del Festival Sala Joven, una cita que reúne once propuestas de creadores y creadoras menores de 35 años. El objetivo es que el público de hoy conozca a quienes serán protagonistas del teatro del futuro.

Los jóvenes toman la palabra en este Festival para hablar de feminismo, memoria, identidad o revisitar clásicos como La Gaviota o El Coloquio de los perros.

La actriz y dramaturga Karina Garantivá es la directora de esta muestra que pretende convertirse en un puente entre el público, la industria teatral y la creación más joven.

Compañía Mujer en obras. Fotografía de Luz Soria

“Los espectáculos que se incluyen en esta edición son solo una pequeña parte de todos los proyectos que están produciendo los creadores y creadoras jóvenes en Madrid, tenemos una auténtica explosión creativa que necesita impulso y reconocimiento para consolidarse”, explica Garantivá.

Títulos como Ahora que nos dejan hablar, Hoy es el día o Ese toro que no veíamos son un grito que pone sobre las tablas la invisibilidad que experimentan los jóvenes y la urgencia de llevar a los escenarios los temas y problemas que les preocupan.

«Creo que este Festival va a servir para desmontar algunos mitos sobre el teatro que interesa a la juventud. Existe el tópico de que en el teatro joven el texto no se valora porque les importa más el espectáculo en sí, nada más lejos de la realidad, la ambición de escribir textos teatrales, de revisar el pasado, de tocar los grandes temas y dialogar con los clásicos está presente en las nuevas generaciones. Así lo demuestran los trabajos de Olga Mínguez, Alberto Fonseca, Esther Berzal o Adrián Perea. Lo que sí tienen los días contados son los compartimentos estancos de la creación, la generación millenial del teatro se mueve con libertad entre todos géneros y disciplinas del teatro. Pasan de actuar a dirigir o de diseñar a producir con bastante naturalidad”, continúa diciendo Karina Garantivá.

La gaviota o los hijos. Fotografía de Jorge Rico

El Festival Sala Joven es una muestra plural que desmonta los mitos que intentan colectivizar a la juventud, cada persona joven es única y así lo demuestran estas obras en las que se incluyen espectáculos de todos los géneros y estilos. Uno de los estrenos más esperados será el de Victoria viene a cenar, de Olga Mínguez, que narra el encuentro de Clara Campoamor y Victoria Kent la noche anterior a la aprobación del sufragio femenino.

Pablo Quijano, clausurará el Festival con una versión libre del clásico de Chejov La Gaviota, junto a la artista malagueña La Dani y a la Compañía Traspasarte con su distopía Furbytale.

“Otro mito extendido es que las plataformas digitales acabarían con el interés de la juventud por el teatro, esto no se sostiene, los eventos en vivo son fundamentales para ellos, lo que si está claro es que estos nuevos formatos sirven para complementar la experiencia de asistir al teatro y las compañías cada vez reúnen más competencias para ofrecer contenidos complementarios para compartir principalmente a través de internet, afirma, por último la directora de la Muestra.

Más información:

https://galileoteatro.es/

https://www.teatrourgente.com/

info@teatrourgente.com

Marco Mezquida ha sido el protagonista del primer concierto de 2021 en el 52 Festival de Jazz de Barcelona, 4 años después de su debut el 2017 en el homenaje al gran Tete Montoliu.

Cierre los ojos y escuche… Un piano y Marco Mezquida llenan la Sala Barts de música donde antes sólo había silencio, un silencio difícilmente soportable. La música como terapia para superar este embate emocional y confinar por unos momentos los estragos del virus.

El artista menorquín nos abre puertas y viajamos entre la dura realidad y otro mundo invisible. Este tráfico emocional imprescindible nos ha sido ocultado durante mucho tiempo, la música en directo tiene esto, la capacidad de transportarte, sentir y sonreír. Salir y viajar, prohibiciones asimiladas pero aceptadas menudo con acritud, esta es la apuesta del Festival de Jazz, disfrutar sin salir de Barcelona. Música km0.

Tener el Marco Mezquida entre nosotros es una suerte, un músico de esta categoría no debería ser ignorado ni por el público ni por la industria, su talento la ha convertido en una de las estrellas emergentes del panorama musical internacional. Marco ha sido el protagonista del primer concierto del 2021del 52º Festival de jazz de Barcelona, ​​4 años más tarde de su debut el 2017 en el homenaje al gran Tete Montoliu.

El directo forma parte de su gira «All about Marco», una gira que incluye cada noche tres proyectos y tres formaciones diferentes, y con el mismo artista conversando con el público sobre su poética. Un concierto dividido en tres: Talismán. Beethoven Collage, y el regreso al festival del proyecto que lidera con el guitarrista flamenco nacido en Cornellà de Llobregat Juan Gómez ‘Chicuelo’.

Son poco más de las 20.10 h. y Marco sale al escenario, visiblemente feliz y sólo le salen palabras de agradecimiento recordando lo difícil para un músico de estar callado, de no conectar con el público. Gracias, gracias, gracias, dice.

Marco Mezquida

Y comienza Talismán acompañado por Martín Meléndez al violonchelo y Aleix Tobías a la percusión. Todo comienza a fluir, todo se impregna de sonidos cercanos y lejanos, ritmos latinos y turcos, melodías americanas y contemporáneas, una fusión vigorosa que transita entre el lirismo y los sonidos urbanos. Marco es generoso y deja que sus músicos expresen y vuelen con él, todos 3 compactos y liberados al mismo tiempo con la musicalidad como único camino. No es cuestión de preguntarse si esto es Jazz o no, el concepto no importa, es la travesía entre estilos que marca el objetivo, que no es otro que construir música y hacerla bella y gozosa.

Beethoven Collage es el homenaje que Mezquida cuanto al compositor alemán en el 250 aniversario de su muerte, el Jimi Hendrix de la improvisación como dice él mismo. Esta segunda parte demuestra la versatilidad del pianista y la capacidad de reinterpretar con un compromiso constante por la musicalidad. Acompañado por Masa Kamaguchi al bajo, David Xirgu a la batería y Pablo Selnik a la flauta, todo fluye, como un río que atraviesa dos siglos y medio de música, donde los ritmos tradicionales, el jazz y el flamenco se entrelazan y se separaron como un rizoma, de manera orgánica, sutil y enérgica.

La sorpresa de la noche, el arte de Silvia Pérez Cruz, que consigue crecer más aún acompañado por su gran amigo Marco Mezquida transforma la música, la recrea, la deconstruye para dibujar con el colores de raíces latinas unas composiciones llenas de tradición y profunda renovación. Aires nuevos nacidos del amor al pasado. En como interludio entre la segunda y tercera parte, la sorpresa de la noche, el arte de Sílvia Pérez Cruz que logra crecer más aún acompañado por su gran amigo Marco. Ellos dos son puro encantamiento, la fascinación de la voz y el lirismo del piano en perfecta armonía. Música a flor de piel, sensual. El público contiene la respiración. Silencio. Un regalo.

Al final aparece Chicuelo y la magia con Marco se volvió a producir. Hablan un lenguaje común nacido de los ritmos del Mediterráneo que ellos comparten y de una Barcelona rumbera, flamenca y jazzística. Todo comenzó con aquel disco grabado en 2017 en el Taller de Músics donde ellos dos son profesores. Una conexión musical de colores llamativos, intensidades vitales y emociones comunes. El concierto se llenó de referencias musicales vividas, mezcla de aguas marinas, de sonidos globales. Los dos maestros acompañados a la percusión por un inspirado y luminoso Paco de Modo hipnotizaron al público enmascarado de la sala Barts. Marco y Chicuelo conversan, se explican con un idioma donde todo se mezcla, con raíces mestizas, poniendo una técnica prodigiosa al servicio de la creación artística, con sutileza y amor por la música.

Marco Mezquida ya es una realidad y este concierto certifica su capacidad camaleónica y versátil de combinar estilos y formaciones sin perder precisión ni convicción. Su musicalidad es capaz de deslumbrar y de llevar al público a una profunda reflexión, abriendo puertas donde no existen fronteras, donde el arte universal es la cuna y donde la creatividad está al servicio de emociones vitales y inefables.

Así ha comenzado el 52 Festival de Jazz de Barcelona en 2021, un ágora de creación artística de primer nivel, abierto a todos, en un tiempo convulso donde la cultura se debe defender como un bien de primera necesidad.

Artículo publicado el 22 de enero en Públic, en catalán:

Tot sobre Marco i la música

Marco Mezquida ha estat el protagonista del primer concert del 2021 del 52è Festival de Jazz de Barcelona, 4 anys més tard del seu debut el 2017 en l’homenatge al gran Tete Montoliu.

Tanqueu els ulls i escolteu… Un piano i Marco Mezquida omplen la Sala Barts de música on abans només hi havia silenci, un silenci difícilment suportable. La música com a teràpia per superar aquest embat emocional i confinar per uns moments els estralls del virus.

L’artista menorquí ens obre portes i viatgem entre la dura realitat i un altre món invisible. Aquest trànsit emocional imprescindible ens ha estat ocultat durant molt de temps, la música en directe té això, la capacitat de transportar-te, sentir i somriure. Sortir i viatjar, prohibicions assimilades però acceptades sovint amb agror, aquesta és l’aposta del Festival de Jazz, gaudir sense sortir de Barcelona. Música km0.

Tenir el Marco Mezquida entre nosaltres és una sort, un músic d’aquesta categoria no hauria de ser ignorat ni pel públic ni per la indústria, el seu talent l’ha convertit en una de les estrelles emergents del panorama musical internacional. Marco ha estat el protagonista del primer concert del 2021del 52è Festival de jazz de Barcelona, 4 anys més tard del seu debut al 2017 en l’homenatge al gran Tete Montoliu.

El directe forma part de la seva gira “All about Marco”, una gira que inclou cada nit tres projectes i tres formacions diferents, i amb el mateix artista conversant amb el públic sobre la seva poètica. Un concert dividit en tres: Talismán. Beethoven Collage, i el retorn al festival del projecte que colidera amb el guitarrista flamenc nascut a Cornellà de Llobregat Juan Gómez ‘Chicuelo’.

Son poc més de les 20.10h i Marco surt a l’escenari, visiblement feliç i només li surten paraules d’agraïment recordant com és de difícil per un músic d’estar callat, de no connectar amb el públic. Gràcies, gràcies, gràcies, diu.
I comença Talismán acompanyat per Martín Meléndez al violoncel i Aleix Tobies a la percussió. Tot comença a fluir, tot s’impregna de sons propers i llunyans, ritmes llatins i turcs, melodies americanes i contemporànies, una fusió vigorosa que transita entre el lirisme i els sons urbans. Marco és generós i deixa que els seus músics s’expressin i volin amb ell, tots 3 compactes i alliberats al mateix temps amb la musicalitat com a únic camí. No és qüestió de preguntar-se si això és Jazz o no, el concepte no importa, és la travessa entre estils que marca l’objectiu, que no és altre que construir música i fer-la bella i joiosa.

Beethoven Collage és l’homenatge que Mezquida fa al compositor alemany en el 250è aniversari de la seva mort, el Jimi Hendrix de la improvisació com diu ell mateix. Aquest segona part demostra la versatilitat del pianista i la capacitat de reinterpretar amb un compromís constant per la musicalitat. Acompanyat per Masa Kamaguchi al baix, David Xirgu a la bateria i Pablo Selnik a la flauta, tot flueix, com un riu que travessa dos segles i mig de música, on els ritmes tradicionals, el jazz i el flamenc s’entrellacen i se separaren com un rizoma, de manera orgànica, subtil i enèrgica.

La sorpresa de la nit, l’art de Sílvia Pérez Cruz, que aconsegueix créixer més encara acompanyat pel seu gran amic Marco

Mezquida, transforma la música, la recrea, la desconstrueix per dibuixar amb el colors d’arrels llatines unes composicions plenes de tradició i profunda renovació. Aires nous nascuts de l’amor al passat.I com a interludi entre la segona i tercera part, la sorpresa de la nit, l’art de Sílvia Pérez Cruz que aconsegueix créixer més encara acompanyat pel seu gran amic Marco. Ells dos son pur encantament, la fascinació de la veu i el lirisme del piano en perfecta harmonia. Música a flor de pell, sensual. El públic conté la respiració. Silenci. Un regal.

A al final apareix Chicuelo i la màgia amb Marco es tornar a produir. Parlen un llenguatge comú nascut dels ritmes de la Mediterrània que ells comparteixen i d’una Barcelona rumbera, flamenca i jazzística. Tot va començar amb aquell disc gravat el 2017 al Taller de Músics on ells dos son professors. Una connexió musical de colors llampants, intensitats vitals i emocions comunes. El concert es ple de referències musicals viscudes, mescla d’aigües marines, de sons globals. Els dos mestres acompanyats a la percussió per un inspirat i lluminós Paco de Mode van hipnotitzar al públic emmascarat de la sala Barts. Marco i Chicuelo conversen, s’expliquen amb un idioma on tot es barreja, amb arrels mestisses, posant una tècnica prodigiosa al servei de la creació artística, amb subtilesa i amor per la música.

Marco Mezquida ja és una realitat i aquest concert certifica la seva capacitat camaleònica i versàtil de combinar estils i formacions sense perdre precisió ni convicció. La seva musicalitat es capaç d’enlluernar i de portar el públic a una profunda reflexió, obrint portes on no existeixen fronteres, on l’art universal n’és el bressol i on la creativitat està al servei de emocions vitals i inefables.

Així ha començat el 52è Festival de Jazz de Barcelona al 2021, una àgora de creació artística de primer nivell, obert a tothom, en un temps convuls on la cultura s’ha de defensar com un bé de primera necessitat.

La 16ª edición del Festival Ellas Crean vuelve este fin de semana con la programación que tuvo que ser aplazada por la pandemia del coronavirus.

Su directora, Concha Hernández, explica para Espacio Público qué es este Festival: Ellas Crean es un festival multidisciplinar, nacido hace 16 años al calor de la celebración del 8 de marzo, día internacional de las mujeres, organizado por el Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades, que cuenta con la colaboración del Ministerio de Cultura y de la Comunidad de Madrid.

Su propósito es mostrar la enorme creatividad de las mujeres y reivindicar su presencia en las programaciones culturales, porque las estadísticas muestran y demuestran una persistente desigualdad con respecto a los hombres. También quiere ser una plataforma para descubrir nuevos talentos.

Concha Hernández, directora del Festival Ellas Crean

El propósito de Ellas Crean es mostrar la enorme creatividad de las mujeres y reivindicar su presencia en las programaciones culturales, porque las estadísticas muestran y demuestran una persistente desigualdad con respecto a los hombres. También quiere ser una plataforma para descubrir nuevos talentos.

Programado en un principio para el 5 de marzo, este año tuvo que ser aplazado por la situación creada por la pandemia Covid-19: Presentamos el festival el 4 de marzo, y diez días después estábamos confinados, solo pudimos realizar un 20% de la programación. Hubo mucho desconcierto, miedo a la cancelación… Había mucho trabajo previo hecho, muchos trabajos ya realizados, muchos ensayos, obras por encargo, que solo podrían ser cobradas si se realizaba la actividad… pequeñas empresas, autónomos… Por descontado, mucha, mucha ilusión. Nuestro empeño estuvo en que se pospusieran las actividades. He de decir que tanto el Instituto de la Mujer como el Ministerio de Cultura optaron por esta opción y nos apoyaron en todo momento. Y ese momento ha llegado ahora en julio y continuará en septiembre. Estamos muy satisfechas. Va a ser muy emocionante el encuentro con el público en el Museo del Prado el próximo viernes 17 de julio. Será con Rafaela Carrasco, ella y Muriel Romero en el Museo Arqueológico Nacional al día siguiente, sábado 18, serán las encargadas de abrir esta segunda parte de Ellas Crean, nos dice Concha

A pesar de los momentos de perplejidad, miedo e inseguridad que vive no solo la escena cultural, sino la sociedad en general, Concha Hernández lanza un mensaje de ilusión y esperanza: No hay que tirar la toalla, hay que seguir trabajando para que la cultura continúe. En momentos de crisis como este, desde las instituciones públicas tenemos la obligación moral de seguir apostando por nuestras artistas, esto es, poner todos los medios posibles para que el hecho cultural siga siendo posible. Tenemos que ser capaces de que nuestros artistas puedan vivir de su trabajo. Que la cultura sea considerada como uno de los pilares básicos de nuestra sociedad, como lo son la educación y la sanidad. Esto es, un Derecho Fundamental. Y, por supuesto, que se respete la Ley de Igualdad y que haya una presencia equilibrada de mujeres y de hombres. Que un día no sean necesarios festivales como Ellas Crean, porque la igualdad sea una realidad. 

Cecilia Bartoli, Jane Birkin, Mariza, Marianne Faithfull, Juliette Greco, Katia y Marielle Labèque, Alicia Alonso, María Pagés, Tamara Rojo, Luz Casal, Carmen Linares, Ana María Matute, Ángeles Caso, María Dueñas, Icíar Bollain, Isabel Coixet o Inés París, entre otras muchas más, son algunas de las artistas y creadoras que ya forman parte de la memoria viva de Ellas Crean.

La programación de este año, a pesar de todas las dificultades, no se queda atrás y podremos ver desde el viernes 17 de julio a la Compañía Rafaela Carrasco en la Sala de las Musas del Museo Nacional del Prado, donde presentará su coreografía Ariadna. Al hilo del mito. El Instituto Stocos de Muriel Romero y Pablo Palacio mostrarán al día siguiente, sábado 18, Oecumene, versión site specific en el salón de actos del Museo Arqueológico Nacional. Y el fin de semana se completará con la representación de la pieza El cuerpo va al museo, de la compañía Somosdanza de las coreógrafas Cristina Henríquez y Lucía Bernardo, en el Museo de América.

Tras las vacaciones de agosto, el Festival retomará su programación el 19 de septiembre con la coreografía Tálamo de Mónica Iglesias, que se presentará en el Museo del Romanticismo. El 23 de septiembre podremos ver un doble espectáculo de danza y poesía: el Museo Cerralbo acogerá la obra Picnic on the moon, de las coreógrafas Júlia Godino y Alexa Moya. Y por la tarde, en la Biblioteca Nacional de España, tendrá lugar el encuentro poético La herida que nos nombra, con la participación de las poetas Rosana Acquaroni y Cecilia Quílez.

En momentos de crisis como este, desde las instituciones públicas tenemos la obligación moral de seguir apostando por nuestras artistas, esto es, poner todos los medios posibles para que el hecho cultural siga siendo posible.

La música será la protagonista de las actividades del 26 de septiembre. En el Museo Arqueológico Nacional Ellas Crean presentará un trabajo musical concebido expresamente para el festival, un concierto de música contemporánea perfilado por Teresa Catalán (Premio Nacional de Composición Musical) con la colaboración de la Asociación Mujeres en la Música (AMM). Cinco obras para percusión, estrenos absolutos, interpretados también por mujeres, junto con la primicia de la intervención poética, también creada específicamente para este evento, por Nuria Ruiz de Viñaspre. Compositoras: Alicia Díaz de la Fuente, Laura Vega, Carmen Verdú, Raquel Quiaro y Carme Fernández Vidal. Intérpretes (percusionistas): María Berenguer, Irene Chamorro y Celia Berlinches. Poeta: Nuria Ruiz de Viñaspre.

Esta 16ª edición concluirá el 28 de septiembre en el Museo Sorolla, con la grabación de la representación de la pieza Las sillas, de Blanca Arrieta, que será difundida posteriormente en el canal de YouTube de Ellas Crean, para seguidores de todo el mundo.

Y no será esta la única cita digital de Ellas Crean: también serán emitidas on line las piezas Llŏkke, de Olatz de Andrés, y Boceto efímero #9, de Mónica Runde e Inés Narváez Arróspide, grabadas en los museos Thyssen-Bornemisza y el Lázaro Galdiano, respectivamente. Asimismo, también habrá online un debate sobre la situación de las mujeres en las artes escénicas y la música, que contará con la participación de las principales asociaciones de mujeres de estos sectores. Clásicas y Modernas, LMPT, Mujeres en la Música, MIM y AMCE.

Ellas crean 2020, Muriel Romero: